Materiales y Tratamientos para la Alta Resistencia
El cuerpo de aluminio fundido a presión es altamente valorado en el ámbito de la iluminación exterior debido a su extraordinaria resistencia a la oxidación y durabilidad. Esta robustez se logra principalmente a través de dos tratamientos esenciales: la cataforesis y la pintura con resinas de poliéster estabilizadas contra los rayos UV.
La cataforesis es un proceso de recubrimiento electroquímico que proporciona una protección superior contra la corrosión. Durante este procedimiento, el aluminio fundido a presión es sumergido en un baño de pintura catódica, y mediante la aplicación de una corriente eléctrica, las partículas de pintura se adhieren uniformemente a toda la superficie del metal. Este recubrimiento forma una barrera efectiva contra los elementos climáticos adversos, como la humedad y la salinidad, que son factores desencadenantes de la oxidación.
Por otro lado, la pintura con resinas de poliéster estabilizadas contra los rayos UV juega un papel crucial en la conservación de la apariencia del producto. Estas resinas son especialmente formuladas para resistir la decoloración y el deterioro causados por la exposición prolongada al sol. Al aplicar esta capa protectora, se asegura que el aluminio fundido a presión mantenga su estética original y funcionalidad durante un periodo prolongado, minimizando la necesidad de mantenimiento constante.
La combinación de la cataforesis y la pintura con resinas de poliéster estabilizadas contra los rayos UV convierte al aluminio fundido a presión en una opción ideal para aplicaciones de iluminación exterior. No solo se garantiza una larga vida útil, sino que también se facilita un mantenimiento mínimo, lo que representa una ventaja significativa en términos de costos y eficiencia a largo plazo. Por estas razones, el aluminio fundido a presión tratado con estos métodos se consolida como un material de elección en la fabricación de componentes de iluminación exterior, destacándose por su fiabilidad y resistencia en entornos exigentes.
El diseño del producto de iluminación exterior en cuestión incluye varios componentes que garantizan tanto la estética como la seguridad y funcionalidad del mismo. Uno de los elementos clave es el difusor de vidrio templado y serigrafiado. Este difusor no solo mejora la apariencia general del dispositivo, sino que también proporciona una protección adicional contra impactos y temperaturas extremas, asegurando así una mayor durabilidad.
Para garantizar la estanqueidad del dispositivo, se utilizan juntas de silicona. Estas juntas aseguran que ni el polvo ni el agua puedan penetrar en el interior del equipo, manteniendo así su buen rendimiento a lo largo del tiempo. Además, el reflector de aluminio anodizado es otro componente crucial, ya que mejora la eficiencia lumínica al maximizar la reflexión de la luz, permitiendo una iluminación más efectiva y uniforme.
La fijación del dispositivo es robusta y resistente a la corrosión gracias a los pernos de acero inoxidable A4. Estos pernos garantizan que el producto permanezca firmemente en su lugar, incluso bajo condiciones ambientales adversas. Asimismo, el producto se suministra con un conector rápido enchufe IP68, que incluye una barrera anticondensación. Este detalle es esencial para prevenir la acumulación de humedad en el interior del dispositivo, prolongando así su vida útil y manteniendo su rendimiento óptimo.
En cuanto a la iluminación, el producto ofrece opciones de LED disponibles en tres temperaturas de color: 4000K, 3000K, y 2700K. Esta variedad permite seleccionar la temperatura de color más adecuada para cada aplicación específica, asegurando una iluminación personalizada y eficiente. Es importante resaltar que el producto cumple con la norma EN62471 y está clasificado en el grupo de riesgo RG0 exento, lo que significa que no presenta riesgos fotobiológicos. Esto asegura que el uso del producto es seguro para la vista humana, eliminando cualquier preocupación de daños o riesgos asociados con la exposición a la luz emitida.