El cuerpo de aluminio fundido a presión destaca por su excepcional resistencia a la oxidación, una característica lograda mediante un tratamiento especializado de cataforesis. Este proceso involucra la aplicación de capas protectoras que aseguran una mayor durabilidad del material. Además, se utiliza pintura con resinas de poliéster estabilizadas contra los rayos UV, lo que garantiza que la superficie no se degrade con la exposición prolongada al sol, manteniendo así su apariencia y funcionalidad intactas.
Una de las principales características de estos cuerpos es la incorporación de difusores de vidrio templado y serigrafiado. Este tipo de vidrio no solo ofrece una mayor resistencia a los impactos, sino que también mejora la distribución de la luz, proporcionando un rendimiento lumínico superior. La durabilidad del vidrio templado asegura que el producto pueda soportar condiciones ambientales adversas sin comprometer su integridad estructural.
Para garantizar un sellado perfecto y evitar la entrada de polvo y humedad, se utilizan juntas de silicona. Estas juntas son esenciales para mantener el rendimiento y la vida útil del cuerpo de aluminio fundido a presión, asegurando que los componentes internos estén protegidos en todo momento. Además, el reflector de aluminio anodizado maximiza la eficiencia lumínica, dirigiendo la luz de manera óptima y reduciendo pérdidas energéticas.
La estructura se completa con pernos de acero inoxidable A4, los cuales ofrecen una fijación segura y duradera. Este tipo de acero es conocido por su alta resistencia a la corrosión, lo que lo convierte en una opción ideal para aplicaciones en exteriores. Además, el diseño robusto del producto incluye un conector rápido enchufe IP68 con barrera anticondensación, asegurando una instalación sin complicaciones y una protección óptima contra la humedad y el polvo. Este conector no solo facilita el proceso de instalación, sino que también garantiza que el sistema se mantenga operativo en las condiciones más exigentes.
Opciones de Iluminación y Seguridad Fotobiológica
El uso de productos de iluminación LED ha revolucionado la forma en que iluminamos nuestros espacios, y los cuerpos de aluminio fundido a presión no son la excepción. Estos productos ofrecen una variedad de opciones de iluminación, adaptándose a diferentes necesidades y ambientes gracias a sus diferentes temperaturas de color. Las opciones disponibles incluyen 4000K (luz neutra), 3000K (luz cálida) y 2700K (luz muy cálida), cada una proporcionando una atmósfera específica y útil para distintas aplicaciones.
La temperatura de color de 4000K es ideal para ambientes que requieren una iluminación brillante y clara, similar a la luz natural del día. Por otro lado, las temperaturas de 3000K y 2700K ofrecen una luz más cálida, creando un ambiente más acogedor y relajante, perfecto para espacios residenciales y áreas de descanso.
Además de la versatilidad en la iluminación, estos productos cumplen con la normativa EN62471, lo que garantiza que no presentan riesgos fotobiológicos. Esta normativa clasifica las fuentes de luz en diferentes grupos de riesgo en función del potencial de daño a la vista y la piel por exposición prolongada. Los cuerpos de aluminio fundido a presión están clasificados en el grupo de riesgo RG0 exento, lo que significa que son completamente seguros para su uso en una variedad de entornos. Esto es particularmente importante en aplicaciones donde la seguridad y el bienestar son prioritarios, como en hospitales, escuelas y hogares.
La combinación de opciones de iluminación flexibles y un alto estándar de seguridad fotobiológica convierte a estos productos en una solución avanzada y segura para aplicaciones tanto en interiores como en exteriores. La durabilidad y resistencia del cuerpo de aluminio fundido a presión, junto con la seguridad y eficiencia de la tecnología LED, aseguran una iluminación óptima y confiable en cualquier circunstancia.